Moisés huye a Madián
11 Y aconteció que en aquellos días, crecido ya Moisés, salió a donde sus hermanos y vio sus duros trabajos[a]; y vio a un egipcio golpeando a un hebreo, a uno de sus hermanos. 12 Entonces miró alrededor[b] y cuando vio que no había nadie, mató al egipcio y lo escondió en la arena. 13 Y al día siguiente salió y vio a[c] dos hebreos que reñían, y dijo al culpable[d]: ¿Por qué golpeas a tu compañero? 14 Y él respondió: ¿Quién te ha puesto de príncipe[e] o de juez sobre nosotros? ¿Estás pensando[f] matarme como mataste al egipcio? Entonces Moisés tuvo miedo, y dijo: Ciertamente se ha divulgado el asunto. 15 Cuando Faraón se enteró del[g] asunto, trató de matar a Moisés; pero Moisés huyó de la presencia de Faraón y se fue a vivir a[h] la tierra de Madián, y allí se sentó junto a un pozo.
16 Y el sacerdote de Madián tenía siete hijas, las cuales fueron a sacar agua y llenaron las pilas para dar de beber al rebaño de su padre. 17 Entonces vinieron unos[i] pastores y las echaron de allí, pero Moisés se levantó y las defendió, y dio de beber a su rebaño. 18 Cuando ellas volvieron a Reuel, su padre, él dijo: ¿Por qué habéis vuelto[j] tan pronto hoy? 19 Respondieron ellas: Un egipcio nos ha librado de mano de los pastores; y además, nos sacó agua y dio de beber al rebaño. 20 Y él dijo a sus hijas: ¿Y dónde está? ¿Por qué habéis dejado al hombre? Invitadlo a que coma algo[k]. 21 Moisés accedió a morar con aquel hombre, y él dio su hija Séfora a Moisés. 22 Y ella dio a luz un hijo, y Moisés le puso por nombre Gersón[l], porque dijo: Peregrino[m] soy en tierra extranjera.
Dios oye a Israel
23 Y aconteció que pasado mucho tiempo[n], murió el rey de Egipto. Y los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, y clamaron; y su clamor, a causa de su servidumbre, subió a Dios. 24 Oyó Dios su gemido, y se acordó Dios de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob. 25 Y miró Dios a los hijos de Israel, y Dios los tuvo en cuenta[o].